ESPANA
Levante
[Summary: The priest who served for years at a church in Ribera while teaching in the township has been sentenced to five years in prison. He told children they would go to hell if they told of the abuse they were subjected to for months. The judge said the children were forced to undress and submit to touching, acts which the children considered to be repulsive.]
CARLOS ALÓS El cura que ofició durante años en una iglesia de la Ribera mientras impartía clases en el municipio, y que ha sido condenado a cinco años de prisión, amenazaba a los menores con que irían al infierno si contaban los abusos a los que fueron sometidos durante meses. Los menores silenciaron las vejaciones de que eran objeto porque les atormentaba esa idea y por miedo y vergüenza.
El juez declara probado que existió reiteración y frecuencia en los actos de abuso sexual, en los que el acusado obligaba a que le realizaran tocamientos y les hacía desnudarse, lo que los menores consideraban «repulsivo».
Las víctimas, que declararon en el juicio por videoconferencia, señalaron, según recoge la sentencia, que se sentían «obligados» y que tenían miedo a las consecuencias si contaban los hechos. Uno acababa de cumplir 13 años cuando comenzaron los abusos y otro contaba con 14, aunque la situación se prolongó hasta que cumplió los 15 años. Cuando el párroco acababa con los abusos, siempre les pedía disculpas y les decía que no volvería a pasar.
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