MEXICO CITY (MEXICO)
El Universo [Guayaquil, Ecuador]
August 25, 2005
Video de un acto sexual de obispo
Un video que causó la renuncia del obispo de la provincia de Santiago del Estero, Juan Carlos Maccarone, y sacude a la Iglesia Católica argentina, comenzó a circular y muestra al religioso en la intimidad con el joven –que grabó la cinta a escondidas–, en lo que fue interpretado como una venganza política.
“El obispo Maccarone me engañó. Prometió conseguirme trabajo y no cumplió, por eso decidí vengarme y lo filmé mientras manteníamos un encuentro íntimo. No le tengo miedo a nadie. Soy bien católico”, declaró Alfredo Serrano, de 23 años, quien provocó el escándalo que terminó con la dimisión del obispo, aceptada de inmediato por el papa Benedicto XVI.
El video, que al parecer llegó al Vaticano, comenzó a circular en Santiago del Estero particularmente y muestra relaciones íntimas de Serrano con el prelado, de 64 años, y tiene adicionada una entrevista al joven, según medios.
La Iglesia Católica argentina, culto mayoritario del país, atribuyó el video a una “venganza política” contra Maccarone, un progresista moderado, y aludió al controvertido ex caudillo Carlos Juárez, cinco veces gobernador de Santiago del Estero y con decisiva influencia durante medio siglo en el distrito, uno de los más pobres del país.
El vocero del Episcopado argentino, padre Jorge Oesterheld, afirmó ayer que en Santiago del Estero la Iglesia actuó “a favor de los que menos tienen” en medio de un clima de “opresión política”.
Unos 25 sacerdotes sufrieron investigaciones, escuchas telefónicas e intimidaciones durante los últimos ocho años en Santiago del Estero, indicaron fuentes políticas.
Casi la mitad de los 47 sacerdotes de ese distrito tenía su propia foja en los archivos de la Dirección de Informaciones (D-2), conocida como “la Gestapo de Juárez”, creada por el veterano caudillo y ex gobernador.
Serrano involucra en la cinta al entorno de un poderoso empresario local, Néstor Ick, que ganó casi todas las licitaciones de empresas de servicios en las últimas gestiones de Juárez y en la de su esposa Mercedes Aragonés, cuya gobernación fue intervenida por el Ejecutivo federal en el 2004.
El joven, que trabaja de remisero, asegura que no recibió “un solo peso por el video” y que tampoco quiso “extorsionar a nadie”.
Pero luego admitió haber vendido la cinta al grupo Ick, dueño del Canal 7 de Santiago del Estero, por 50.000 o 95.000 pesos (17.200 dólares o 32.700 dólares).
La titular de la agrupación humanitaria Madres de Plaza de Mayo, Hebe de Bonafini, se solidarizó ayer con Maccarone en una carta en la que lo elogia por “apoyar a los desposeídos y reprimidos” de la nación.