La especial historia del denunciante del obispo Infanti
By L. Zapata And J. Verdejo
La Tercera
October 07, 2018
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En el entorno del obispo Luis Infanti (en la imagen) se descartan los hechos. |
[The peculiar story of the informant in Bishop Infanti cover-up investigation]
La eventual víctima, quien lo apunta por un supuesto encubrimiento, tiene peculiares apariciones en prensa, pero no sería el único relato que maneja la fiscalía.
El pasado jueves 28 de junio, a las 22.53 horas, llegó al correo electrónico de la Fiscalía de Aysén la denuncia de una mujer, de iniciales C. V. V., quien daba cuenta de los supuestos delitos de “encubrimiento, violación, secuestro y torturas en perjuicio de mis tres hijos, exalumnos de la obra Don Guanella, internado San Luis Puerto Cisnes”.
En el escrito, la denunciante menciona a varios sacerdotes como autores de presuntos abusos cometidos durante la década de los años 60, y cierra con el actual obispo de Aysén, Luis Infanti, como eventual encubridor de los hechos.
Según fuentes de Fiscalía, otro escrito de similares características se ingresó en Santiago, esta vez interpuesto por una de las presuntas víctimas, J. J. V., hijo de la denunciante, dando origen a la investigación que apunta al obispo Infanti como uno de los siete prelados actualmente indagados por el Ministerio Público.
Si bien la causa se abrió en la Región de Aysén, el caso finalmente pasó a manos del Fiscal Regional de O’Higgins, Emiliano Arias, quien indaga los delitos sexuales cometidos por miembros de la Iglesia Católica.
El caso, eso sí, es extraño, peculiar, pues, según familiares de los denunciantes, la mujer C. V. V., autora del primer correo electrónico, habría fallecido en Argentina, por lo que presumen que las denuncias podrían ser fruto de un engaño. Y J. J. V. tiene un amplio historial de hechos “curiosos” en la zona. De ahí que en la diócesis de Aysén exista tranquilidad sobre el tema.
Sin embargo, desde la Fiscalía de Rancagua aclaran que la mujer denunciante no está fallecida y agregan que no sería la única denuncia en esta causa.
Capítulos insólitos
Uno de los casos más emblemáticos en el que estuvo involucrado J. J. V. fue la llamada realizada a TVN por el falso cónsul de Chile en Madrid, identificado como Carlos Montenegro, quien informaba, en 2008, de un compatriota muerto en el accidente de Barajas. Aseguró que la víctima era justamente J. J. V., información que fue descartada después por la Cancillería.
Aquella llamada tiene características similares a la que afectó a un medio Boliviano, donde alguien que se identificó como el director general (sic) de Carabineros, Hermes Soto, informó sobre el apoyo del alto mando institucional a la demanda marítima altiplánica. En la conversación, el falso general volvió a nombrar a J. J. V., esta vez como un exiliado de Pinochet.
El mismo J. J. V. figura en el Poder Judicial presentando un recurso de amparo en favor de Joaquín Guzmán Loera, alias el “Chapo Guzmán”, tras su huida de una cárcel en México, en 2015.
En el archivo Memoria Viva -un proyecto internacional de DD.HH.- se identifica a J. J. V. como presunto exagente de la DINA, quien se “escondió en Alemania desde 1981, que en 1989 aparece solicitando asilo político en Suecia. Se estima que durante su estadía en Europa continuaba espiando a los exiliados para entregar información”, dice la web.
El historial de J. J. V. tiene más apariciones mediáticas. En 2009 otorgó una entrevista a varios medios de comunicación peruanos, ante quienes se identificó como el “enlace chileno de Víctor Ariza”, suboficial de la Fuerza Aérea Limeña acusado de ser un espía chileno.
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