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	Errores Y Dolores By Abraham Santibanez El Diario de Aysen April 1, 2011 http://www.diarioaysen.cl/columnas.php?id=2733 Ha sido, sin duda, el peor momento de su vida. Nunca nadie trato de “criminal” a Francisco Javier Errazuriz Ossa. Ello explica el impacto emocional con que los panelistas de Tolerancia Cero escucharon las acusaciones del medico James Hamilton, una de las victimas del sacerdote Fernando Karadima, Tambien explica la conmocion de quienes seguian el programa de Chilevision en la noche del domingo pasado o vieron su reproduccion en Internet. Y explica, sobre todo, la reaccion del arzobispo de Santiago, Ricardo Ezzati, quien habia manifestado su simpatia por las victimas de abusos sexuales del ex parroco de El Bosque y les habia pedido perdon a nombre de la Iglesia Catolica. "Es inaceptable (...), puede estar muy herido (...), pero eso no justifica que diga del senor cardenal (Errazuriz) lo que ha dicho", senalo a CNN. Tambien el defensor de Karadima Cristian Muga, rechazo las palabras del medico: "Nos parecen absolutamente inaceptables y destempladas". En una entrevista con La Segunda, el propio cardenal, quien ya habia calificado de “error” su reaccion ante las denuncias, fue mas alla: —Yo he dicho que lamento realmente no haber creido en esa denuncia cuando se presento y tampoco haber creido en la denuncia anterior. La primera era muy dificil de creer, porque tenia una fama el padre Karadima de hombre bueno, de hombre santo, de hombre espiritual, que cuando llega una denuncia uno no la cree. Eso es cierto y lo he lamentado y asi lo he expresado. El caso no esta cerrado. Aunque no esta claro si se presento o no, podria haber una apelacion ante El Vaticano. Y en Chile, pese al rechazo inicial de la Corte de Apelaciones, finalmente la Corte Suprema designo una ministra en Visita para que se haga cargo del caso. Su tarea no sera facil ya que en los ultimos dias se acuso a otros miembros de la jerarquia catolica, como cuatro de los cinco obispos que surgieron al alero de Karadima, de ser complices o encubridores de los abusos. Hasta ahora, la voz mas equilibrada ha sido la del arzobispo Ezzati: “Yo creo que hay que distinguir muy bien. En primer lugar, quiero agradecerle al Cardenal Errazuriz lo que ha hecho en todo esto. No es una cosa facil, hay todo un procedimiento canonico que hay que seguir. El senor Cardenal fue el que establecio los Promotores de Justicia, fue el que llego a convencerse de la verosimilitud de las acusaciones y fue quien envio esto a Roma. En mi experiencia de obispo... uno tiene que discernir, tiene que hacer un trabajo de discernimiento para llegar justamente a la conviccion profunda que respete la verdad, que respete a la persona sobre la verosimilitud de un hecho.... El senor Cardenal publicamente ha dicho y ha reconocido cuales pueden haber sido sus debilidades en eso; pero fundamentalmente, yo creo que... ha hecho posible que la Santa Sede diera este decreto, ha sido (su) obra...” Mientras continua el proceso, es evidente que en este caso, como en otros que han conmovido a la opinion publica en los ultimos anos, ha pesado una larga tradicion de secreto y proteccion dentro de la Iglesia Catolica. La transparencia esta llegando, pero cuesta aceptarla. Y duele.
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